domingo, 30 de marzo de 2014

LAGAÑOSOS VIAJEROS. ATRAVESANDO SUDAMÉRICA CON RAQUEL RIVERO







A veces, la cabeza se te llena de planes, proyectos espectaculares que se quedan en eso, proyectos ¿Cómo surge la idea de este viaje y en qué momento sabes que se va a hacer realidad?


La idea me surge cuando escucho a mis compañeros de la universidad, que están de intercambio en Florianópolis, que van a viajar por Sudamérica de mochileros. Cuando se oferto de nuevo la beca Sicue (Intercambio entre universidades fuera de la UE) por supuesto, allí estaba,  la primera para pedirla y esperar con los dedos cruzados a que me la concediesen. Con dos objetivos, terminar mi formación universitaria y poder realizar ese viaje que tanto me había estado rondando por la cabeza.
 
Dijo una vez Unamuno que El fascismo se cura leyendo y el racismo viajando. ¿Cómo ayuda a una persona este tipo de experiencias? ¿Cómo te ha ayudado a ti?


Siempre he pensado que viajar te ayuda a cultivar la mente, conocer culturas, tradiciones, comidas diferentes,…y realmente es cierto. Sobre todo en estos países de Sudamérica que son muy diferente a lo que tenemos nosotros en Europa. No tienen nada que ver con lo que nosotros estamos acostumbrados, el cambio más grande lo note por ejemplo, cuando estaba en el norte de Chile, las ciudades son mucho más caóticas, más ruidosas, venta ambulante, niños vendiéndote comida en la calle,… entonces es cuando empiezo a ver la diferencia que existe entre unos países y otros. Todo esto me ha hecho valorar un poco más lo que tengo, que vivimos con más de lo que necesitamos y que mucha gente da lo que tiene a cambio de nada y otros pocos se aprovechan pero de eso también se aprende





Echando la vista atrás, ¿Cuales crees que han sido la mejor y peor experiencia de este viaje?

Difícil pregunta, podría hablar de tantas que, si tengo que elegir me quedo con  momento que me llenó por completo, fue cuando intente alcanzar la cima del Huayna-Potosi (6088m), es una sensación magnifica exigir lo máximo a tu cuerpo y a la vez de impotencia cuando te das cuenta que el mal de altura no lo puedes controlar aunque deseas con todas tus fuerzas seguir hacia arriba. Siempre me gusto desde pequeña subir picos y para mi estar a esa altura era algo que tenía que probar, las vistas, el manejo de material y todo lo que subir un pico conlleva, es un subidón de adrenalina 

La peor experiencia para mi fueron las diarreas sobre todo al entrar en Bolivia, a pesar de que ya estaba advertida con la comida y el agua, hice lo pude pero creo que es algo que toca pasar.



Una mochila permite un espacio muy reducido. ¿Qué has echado en falta en tu mochila? ¿Qué habrías metido que no metiste? ¿Qué te arrepientes de haber metido?


Cuando viajas con la mochila lo que más echas en falta a veces es una buena cama y una ducha. El resto de las cosas pierden su valor como el móvil, la televisión, el ordenador, el estrés de la vida cotidiana,… Si hubiera metido un libro para poder leer en los viajes largos pero debido al peso y a la falta de espacio en la mochila no pude llevar ninguno. Sinceramente no sacaría nada, cada cosa que lleve hice uso de ella en algún momento del viaje.



¿Cómo ha sido la vuelta a casa, a la rutina diaria? Aunque en tu caso la palabra rutina casi que pierde su significado real ...


Ha sido un tanto extraña era como, ¡anda si tengo cama y me puedo duchar cuando yo quiera!  El poder hacerte la comida cada dia es una gozada ya que durante todo el viaje apenas puedes cocinarte tú mismo, acabas buscando el sitio más barato y listo. 


¿Un miedo superado?


No soy una persona de miedos solo busco superarme y dentro de lo que se puede ser mejor persona.


¿Una valoración personal de tu viaje? ¿Una reflexión? Un consejo para todas esas personas que sueñan con hacer algo comparable a lo tuyo y sin embargo nunca acaban de decidirse a dar el paso adelante 


Una valoración del uno al 10 le daría un  9, siempre queda algo por hacer, por planear y que ver. Me hubiera gustado poder visitar  Ecuador, que estaba en mi plan inicial del viaje, para poder visitar el volcán que está más cercano al sol, creo que queda para otra vez. ¿Una reflexión? Tras todo lo que pude vivir y conocer de estos países, es que les queda a sus gobiernos mucho que trabajar y mucho que hacer para que sus gente vivan como realmente se merecen sobre todo que cuiden de sus niños que realmente son el futuro de su país, yo pude ver demasiada explotación infantil más de lo que me podía imaginar. 


Animo a todo el mundo a viajar que no pongan como escusa el dinero porque realmente se puede llegar a gastar bien poco y disfrutar y conocer muchísimo. Existen páginas web como www.couchsurfing.org que gracias a su hospitalidad te puedes ahorrar mucho en alojamiento o múltiples páginas web que te pueden facilitar mucho tu viaje y economizarlo. Viajar es vivir!!!



¿Cómo te relajas cuando no estás metida en uno de estos embolaos tuyos? Es decir, en el día a día de clases, estudios, trabajo...o lo que dios quiera que sea un día normal en tu vida... 


El deporte, es una manera de relajarme y a la vez de liberar tensiones. En mi caso siempre ha sido la escalada o andar en bici pero como ahora mismo no tengo ninguna de las dos, me estoy dedicando a surfear y a correr, cosas que me está empezando a gustar bastante. Aunque bueno una buena película con palomitas no está nada mal para relajarse.



¿Qué retos te planteas ahora mismo?

Un viaje que tengo pendiente como amante de la escalada es viajar a Minas Gerais y poder disfrutar de la escalada y de alguna ruta de trekking.

En agosto cuando llegue a España lo primero que quiero hacer es hacer una escapada a Margalef y quitarme el mono que tengo de escalar, ya que en Brasil la escalada esta difícil o muy lejos de donde vivo.

Por mi parte nada más, ha sido una auténtica delicia poder sacar esta entrada adelante, es una jodienda porque lo único que me entran son ganas y ganas de viajar ahora mismo, pero las iremos reprimiendo por ahora y ya llegará el momento de volver a sacar las botas a pasear.


Muchas gracias Raquel por haberte tomado la molestia de echarle un ratillo a mis cosillas, que acabes bien todo tu periplo brasileño y te acerques por el pueblo pronto a echar una tarde escalando paí.