lunes, 23 de julio de 2012

SUIZA... TRAS LA VACA MORADA. EPISODIO 2




Volvemos a viajar, a coger un vuelo, a los nervios de llegar pronto y no perder el avión, el jaleo de la facturación, el equipaje, el control, ¿Dónde está mi D.N.I? ¿Y mi tarjeta de embarque? QUE MONAZO TENÍA YA. El destino escogido era obvio, llevabamos 5 años con la idea de volver a patear los Alpes suizos. En el primer interrail habíamos tenido un breve contacto con Interlaken y Grindelwald, todo nevado en un mes de Noviembre...nos dejó tal sensación de que prometía mucho esa zona que enseguida enlazamos un recorrido de montaña para 5 días (pocos, pero el ritmo de vida suizo es elevadíiisimo y más días nos habríamos hecho un agujero enorme en el bolsillo)

En sí, la hoja de ruta marcada venía a ser: llegar a Ginebra en un vuelo desde Madrid (75 euros i/v con Air Edreams) como llegabamos por la mañana, enlazar enseguida un bus hasta Chamonix (55 euros i/v) y una vez alli coger el teleférico que sube a la Aiguille du Midi. Volver a Ginebra y coger un tren hasta Interlaken donde teníamos albergue para dos noches. En Interlaken patear esa zona bien pateada y pasarnos a Zermatt las dos últimas noches, para patear esa zona y enfrentarnos en la medida de lo posible al Matterhorn. Volver el día 11 a Ginebra, pasear por la ciudad con mayor poder adquisitivo de Europa y volver por la tarde noche a Madrid. 5 días, un presupuesto inicial de unos 500 euros y muchas ganas de patear montaña.


Para comenzar el viaje, lo primero asegurar el vuelo, los aviones desde Madrid a Ginebra no son caros, el vuelo dura 1h:50m y el aeropuerto de Ginebra está perfectamente conectado con la ciudad, en diez minutos en tren te plantas en el centro, la terminal de tren está en el mismo aeropuerto asique es facilísimo. Nosotros sin salirnos del aeropuerto pillamos un bus a Chamonix, la conexión no fué nada buena...comenzamos a perder horas entre vuelo y bus y se ajustaba mucho la posibilidad de subir a Aiguille ese día. Efectivamente, llegamos a Chamonix (Alpes franceses) y lo que nos temíamos, el horario de teleférico acaba a las 16:30, el último bus regresa a Ginebra a las 16:45 y.....HAY UNAS COLAS DE CASI DOS HORAS DE ESPERA¡¡¡¡ asique nuestro gozo en un pozo.



Consejo, Chamonix es una pasada de lugar, lo que sacamos en claro es que mejor alojarse alli (o en los alrededores porque Chamonix parece algo caro) y realizar la subida al día siguiente temprano. Dee etse modo ganas todo el tiempo posible y aprovechas el dinero, que tampoco es que sea una excursión barata.

Ya en Interlaken (tres horas desde Ginebra con trasbordo en Berna), albergue ( a falta de poder pillar el Happy inn Lodge de hace 5 años que me pareció excelente) hay muchisimos, este creo que se llamaba AlpLodge, no estaba mal del todo: cocina, habitaciones de seis, bien situado y un barecillo abajo, pero con menos encanto que el del otro albergue. El precio, más caro...unos 30 euros noche)

Toñitos en Interlaken

En Interlaken, aparte de pasear por un pueblo con unos alrededores preciosos, lleno de turistas árabes, indios y orientales...mi consejo es alquilar una bicicleta ( 35 francos suizos el medio día) y pedalear hasta el valle de Lauterbruneen (unos 12 kms por pista forestal) merece muchiiiiiiiisimo la pena, el recorrido es sencillo y podemos acabar la visita en las Trümmelbach Falls (impresionantes cascadas que corren por dentro de una gruta: 10 francos la entrada) el paseo es genial, las vistas increibles y en unas 4 horas has ido, visitado y vuelto a Interlaken... Una cervecilla en uno de los pueblos de camino y te queda un plan elegantisimo.




Otra opción es buscar una ruta de senderismo y patear, hay muchisimas opciones, desde lauterbrunnen parten caminos o teleféricos que te suben a la montaña y puedes encontrar muchos senderos guiados...eso ya depende de las ganas y del dinero, porque cuanto más arriba, más caro cuesta subir...


El segundo día en Interlaken hacemos la excursión deseada a Grindelwald, pueblo de montaña a mitad de camino en la subida al Juangfrau. Subir en tren ya supone unos 18 francos i/v porque ya los trenes de montaña no entran dentro del interrail (esta vez ibamos sobreaviso, la primera vez nos supuso un mazazo económico elegante) 

En Grindelwald, las opciones son las mismas, si tienes dinero, coger un funicular que te eleve más arriba, llegar al glaciar, a los lagos...coger una rutilla de senderismo y patear (lo más económico) depende de cada persona...si tienes 100 euros, subir al Juangfrau o todo lo que se pueda....que no, lo que hicimos nosotros...andar por un  sendero hasta que encontramos una zona de baño apartada, bañarnos y regresar...el agua está que jode de fría, pero te quedas nuevo. Comer en un parquecillo y regresar, ya solo las vistas del Monch, el Juangfrau y el Eiger merecen la pena.




Para llegar a Zermatt, la cosa tiene miga, puedes aprovechar el Interrail hasta Visp pero desde Visp ya no hay vuelta de hoja, una nueva compañia de trenes y hay que pagar (68 francos i/v) he de confesar que esta tampoco nos la esperabamos. El recorrido es de unas 3 horas, pero tuvimos la suerte de llegar en un día despejado, con el Matehorn completamente visible y encima un grupillo de autoctonos tocando el instrumento tradicional, una especie de cuerno enooooooooooooooooooooooooooorme...muy curioso y agradable.


En Zermatt, la opción más asequible dentro de un pueblo compleeeeeeeetamente orientado al turismo y al montañismo es el albergue Mattehornn.. no es nada del otro mundo, de verdad que no lo recomendaría si no fuera lo más asequible, siendo lo más asequible 36 euros noche sin desayuno ni cocina. 



El pueblo es diminuto, hay un Migros y un Coop que te pueden sacar de un apuro para comprar comida, porque todo lo demás son hoteles, tiendas de deporte de montaña y sky y restaurantes de dejarte el higado según entras por la puerta.  De visitar en sí tiene poquillo, lo más curioso es el cementerio de los escaladores, con tumbas de montañeros que han perdido la vida en las cumbres cercanas (sobre todo la del acojonante Mattehorn y la del Monte Rosa) En una de ellas. oh sorpresa¡¡¡¡ un ramo de Edelweiiss, la flor alpina por excelencia...un sueño hecho realidad, aunque sea de una forma algo artificial.

Mi consejo, nuevamente senderismo o bicicleta. Hay senderos guiados por todas partes y en los albergues os pueden aportar un mapa de la zona. Si tienes pelas, funicular y a ascender cimas y sobre todo a disfrutar de la montaña y de imponente presencia de esa mole que es el Cervino y el valle glaciar formado a lo largo de muchos miles de años. 

Una excursión curiosa podría ser en bici o andando coger la pista hasta Furi,más arriba sale una pista a la derecha que llega a una pequeña aldea o conjunto de casas diminuto, todo de madera muy rustico, muy anclado en la montaña, hay una serie de bares con terraza, tomar un cafe y un pedazo de struddel de manzana o Apfelstrudel con vainilla... Después del buen rato de calidad de vida, seguir subiendo por la pista hasta alcanzar la base del Cervino y si las piernas nos dan un poquillo más, alcanzar un alto para poder visualizar todos los valles glaciares que se han establecido en la zona. La cosa es no estarse quieto y aprovechar todo lo que se pueda esta maravilla de lugar, el encanto de sus gentes y de sus cultura y gastronomía.






 Finalmente el último día regreso a Ginebra, para ello 3 horazas con trasbordo en Visp, donde podremos volver a usar el pase de Interrail. Pasamos por Montreux, Laussana, Lyon, Sion..recorremos el lago Lehman y acabamos en Ginebra.

Ginebra ya la conociamos de hace cinco años, tampoco es que tuvieramos mucho tiempo para conocerla, un paseo por el lago hasta llegarnos al chorro, comer en la zona ajardinada de los alrededores, donde hay una escultura de un reloj floral y una secuoya tallada muy curiosa. Si hay más margen de tiempo la catedral y el centro es curioso. Pero lo que de verdad asombra de Ginebra es su alto nivel de vida, sus coches de alta gama, y es muy curioso ver ejecuticos en monopatin o en bicicleta...NOS LLEVAN AÑOS DE VENTAJA¡¡¡

Finalizadas las vacaciones, nuevamente aeropuerto y sanseacabo que llega la rutina... :(

En definitiva, cinco días en un país encantador, con un chocolate que se te va la olla, chicas guapisimas, pero cariiiiiisimo. Aproximando cifras:

1. VUELOS 75 euros
2. INTERRAIL. 119 euros
3. 4 NOCHES DE ALOJAMIENTOS : 125 euros
4. DESPLAZAMIENTOS FUERA DEL INTERRAIL. 120 euros
5. COMIDA: unos tristes 40 euros en total
6. CERVEZAS, CAFES Y TERRACEOS. 40 euros
7. REGALOS. 10 euros jajajajajajajajajajajaja
8. ALQUILER BICICLETAS: 70 euros (bici y tandem 2 días)
9. ENTRADAS CASCADAS LAUTERBRUNNEN 8 euros
10. CHOCOLATE SUIZO: 20 euros 13 tabletas mmmmmmmmmmmmmm

TOTAL: APROXIMADAMENTE UNOS 600 EUROS VAMOS (COMIENDO CHOPPED, COMPRADO LA CERVEZA Y EL VINO EN EL SUPERMERCADO, PAGANDO EL CAFÉ Y LA COCACOLA A 3.90 Y SIN MAS VICIOS QUE LAS PATATAS PAPRIKA¡¡¡¡)

Desayunando de forma económica

A PESAR DE TODO Y DEL CHISPAZO CON EL PASTOR ELECTRICO.....SUIZA ES LA HOSTIA